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Siete de Aragón 346 (22 al 28 de Octubre): 10-11

Javier Mur, Luis Solana y Pepe Torralba, hablaron en Zaragoza de la pesadilla del Pacto del Agua para las zonas de montaña

TRES CARAS DE UNA MISMA CRUZ

Por M.ª Victoria Trigo Bello

Organizada por la Asamblea de Chunta Aragonesista (CHA) en el barrio de San José, de Zaragoza, y dentro de las jornadas "Hablemos del agua", tuvo lugar en el Centro Cultural Teodoro Sánchez Punter, el pasado 19 de Octubre una charla-debate con los alcaldes de Santaliestra, Artieda y Biscarrués. Como presentador y moderador del acto intervino Javier Ramiro, vocal de la Junta de Distrito por CHA en este barrio.

JAVIER MUR.- Alcalde de Santaliestra

  • "La Ribagorza ya ha pagado bastante por el progreso de otros y, además, el actual proyecto del pantano de Santaliestra se ha elaborado sin ningún estudio ni garantía técnica o científica".
  • "La nieve era harina para Joaquín Costa. Hoy es deporte, turismo, negocio".
  • "La gente de Santaliestra se opondrá a la entrada de las máquinas".

En la Ribagorza se lucha desde hace treinta años contra la construcción de pantanos. Setecientas personas en Barasona y en Cáncer vieron cómo sus pueblos quedaban bajo las aguas. Al destrozo sentimental, hay que añadir el riesgo de deslizamientos en el terreno donde se quiere ubicar el pantano de Santaliestra. En 1907, tras una temporada de lluvias, un corrimiento de tierras obstruyó el cauce del Ésera. Por los daños sufridos, se indemnizó a Santaliestra con 23.000 pesetas. Barasona, como ya estaba previsto que quedara bajo la presa de Joaquín Costa, no recibió nada.

Pero se sigue con la cultura especulativa y en Santaliestra y su entorno se tiene la sensación de no haber avanzado en el tiempo. El Gobierno de Aragón nunca ha utilizado sus prerrogativas para salvar el patrimonio del valle del Ésera. La corrupción de altos cargos como Benigno Blanco, Secretario de Aguas y Tomás Sancho, en su día Presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, han merecido la acción jurídica, aunque ahora se encuentre el caso sobreseído "provisionalmente". Esto ha sido recurrido ante la Audiencia de Madrid, para que no quede interrumpido el procesamiento de estas personas.

Santaliestra, pese a la amenaza del pantano, ha crecido en población, la gente ha invertido en su pueblo, quiere seguir en él. Hay un despertar a los deportes de aventura, se han creado seis empresas dedicadas a esta materia, que generan entre trescientos y cuatrocientos millones de pesetas para beneficio del territorio. Por esto resulta inexplicable que Campo y Graus estén negociando contraprestaciones desatendiendo estas oportunidades de negocio, y que Murillo de Liena, Navarri y algún otro acepten tener el agua a dos metros por debajo de sus casas. Además, no hay que ignorar que ya se está hablando de recrecer por encima de la cota 640, para llegar a la cota 675. "Y en caso de que el terreno cediera, apenas tendríamos dos segundos para escapar", añadió Mur, quien aprovechó para reafirmar que la gente de Santaliestra se opondrá a la entrada de las máquinas.


LUIS SOLANA.- Alcalde de Artieda

  • "La construcción del pantano de Yesa marcó el devenir de la vida en la comarca, incluso en los valles altos y mil quinientas personas salieron de la zona".
  • "Alguien tiene que poner coto a las flagrantes vulneraciones de la ley".
  • "No puede haber acuerdo político sin contemplar la postura de la montaña"

En opinión de Luis Solana, cada vez hay más solidaridad hacia la montaña. El recrecimiento de Yesa es un proyecto injustificado de grave impacto al patrimonio cultural y a lo social, pero que avanza por la inercia de la maquinaria de la administración. Surge como alternativa a otros y que es fruto del gusto por las grandes obras de los ingenieros de la administración. Se reavivó en 1992, cuando se fraguó el Pacto del Agua. Solana recuerda que Antonio Aragón, entonces presidente de la CHE, declaró que precisaba un acuerdo en Aragón para poder acometer el Plan Hidrológico Nacional (PHN). Ese acuerdo fue el Pacto del Agua.

No es admisible que el recrecimiento de Yesa sea considerado "un sacrificio necesario". Además, en Artieda no se quiere compensaciones, a diferencia de algunos ayuntamientos navarros (Yesa, Sangüesa, Liédena...) que aceptan proyectos de "ecodesarrollo" como contraprestaciones, o como Sigüés, cuya postura de admitir una obra de dudosa viabilidad, no se comprende en Artieda, aunque prefieren no ver a sus vecinos como enemigos.

Los regantes de Bardenas exigen el recrecimiento de Yesa considerando que también ha de servir para abastecer agua a Zaragoza, pero el recrecimiento es injustificado, pues Zaragoza consume sólo 100 hectómetros cúbicos. Por si esto fuera poco, los afectados por este pantano, han de soportar cómo los regantes van a esa zona con la prepotencia de pasear por su propia finca. Pero ahora, al cumplirse un año del paro del 25 de Octubre, se reincide en que la montaña no va a reblar.


PEPE TORRALBA.- Alcalde de Biscarrués

  • "Desde la Administración Pública se ha transmitido la idea de que el pantano de Biscarrués es un beneficio para los regantes del Alto Aragón y para los regantes expectantes de la Hoya de Huesca".
  • "Por cada cien litros de agua, sólo se utilizan cuarenta. El resto se pierde en acequias inadecuadas".
  • "No es cierto que Biscarrués sea preciso para regadío".

Fue en 1978 cuando se empezó a hablar del pantano de Biscarrués. En 1994 se fue dando a conocer dentro de la opinión pública aragonesa y hoy es una obra pre-adjudicada y en este contexto también está por medio la empresa que contrató a Carlos Escartín cuando éste cesó en el Ministerio de Medio Ambiente.

Los pueblos afectados por este embalse son Santolaria de Gállego, Murillo de Gállego, Las Peñas de Riglos y Ayerbe que es la cabecera de comarca. Este embalse implica la inundación de un núcleo habitado, Erés. Toda la comarca se ha visto beneficiada en los últimos cuatro años por programas de desarrollo rural que han propiciado pequeños negocios de deportes de aventura (rafting, hidro-speed, canoas...), así como un despuntar del sector de la hostelería. El embalse de Biscarrués acabaría con todo este florecimiento económico.

En cuanto a Riegos Del Alto Aragón y a los regantes expectantes de la Hoya de Huesca, afirma Torralba que el primer colectivo es un ejemplo de ineficiencia en el aprovechamiento del agua. Si fueran eficientes, tendrían 120.000 hectáreas de regadío. Los de la Hoya de Huesca no obtendrán agua de Biscarrués porque su canal está 80 metros por encima de la cota del embalse proyectado.

En el proyecto de Biscarrués, de 1995 (época de Borrell), se dice que este embalse sería utilizable para el trasvase. Por tanto, concluye Torralba atacando lo que denomina "caciquismo periodístico", es un engaño promocionar Biscarrués diciendo que es para regadío.


Así las cosas, con la montaña en pie de guerra y con otros proyectos, como el pantano de Lechago (Teruel), donde la especulación urbanística se traduce en un campo de golf en Calatayud, podemos constatar que la Nueva Cultura del Agua, queda todavía muy lejos de ser una realidad.

 

Asociación Río Aragón-COAGRET