El
pasado viernes recibimos la visita del Ministro de Medio Ambiente,
Jaume Matas para la colocación, a su mayor gloria, de la primera
piedra del recrecimiento de Yesa. El acto, al que se nos invitó
(dos representantes por Ayuntamiento) mediante llamada telefónica a
las 11 de la noche de la víspera, puso en evidencia muchas cosas
que para nosotros no son nuevas:
Las
presencias:
-
Representantes
del Gobierno y de Ayuntamientos de Navarra, que sin ninguna vergüenza
pretenden sacar tajada de un proyecto que en absoluto les
perjudica.
-
Cúpulas de
las Comunidades de Regantes, que, como siempre, sólo se
preocupan de su beneficio (lo han puesto en evidencia, una vez más,
con su apoyo al PHN del trasvase).
-
Representantes
significados de algún partido regionalista, cuyo discurso en
materia hidráulica está inmerso en la demagogia fácil y
trasnochada de la redención del secano, sin importarles en su
“regionalismo”que con esa postura están permitiendo al
Gobierno central, realizar las infraestructuras que necesita
para su PHN.
-
Alcaldes
del PP de pueblos beneficiados, y algún despistado de la zona.
Todos
ellos con dos cosas en común: les importa muy poco lo que pase en
esta comarca, y todos esperan tener su parte del “pastel”.
Las
ausencias:
-
La
ausencia de representación del Gobierno Aragonés, así como de
los representantes de los partidos aragoneses en la Comisión de
Seguimiento del Pacto del Agua ha dejado claros los verdaderos
fines de esta obra y el camelo que supone este acuerdo de las
Cortes de Aragón de 1992. Este acuerdo se pensó y se manejó
desde el ministerio (y la CHE) con la misma pretensión que
ahora: poder llevar adelante un PHN. Aunque no hacen falta
interpretaciones: el ministro lo dijo claramente el viernes:
esta es la piedra angular del PHN.
Nosotros
pudimos aprovechar la ¿invitación? (nos hicieron quitar las
pegatinas de YESA NO y fuimos vigilados durante toda nuestra
estancia en el lugar de los actos, ¡como si no fueran más
peligrosos los que llevaban traje y corbata!), para decirle al
ministro lo que pensamos de este proyecto y hacerle entrega de una
carta en la que le decíamos que no van a tener fácil poner la última
“piedra” de esta obra. Después los dejamos con su
“teatrillo”.
Las
personas que se tuvieron que quedar en la carretera se las vieron
con la desproporcionada presencia y actuación de las fuerzas del
“orden”, pero con la fuerza que da la razón, plantaron firme.
Ver a niños y mayores defender con valentía y dignidad su tierra
fue emocionante. Lamentable la detención de Chesús Ferrer, de
Huesca, en su generoso apoyo.
En
el largo camino que está siendo la lucha contra este “despropósito”,
el del viernes fue un día duro al que supimos dar respuesta, en
Yesa y también en Zaragoza. La solidaridad de muchas personas que,
aunque no pudieron estar físicamente, nos apoyaron, fue importante.
No puedo olvidar la llamada desde Erés de la madre de Mariano
Cabrero; me encogió el corazón mucho más que la presencia del
ministro.
El
próximo domingo volveremos a Yesa a decir muy alto que no queremos
esta obra; que esta tierra está cansada de tanto expolio; que el
Pirineo no va a ser, otra vez, pagano del desarrollo de otras
tierras; que no nos vamos a dejar robar el futuro. Vamos a
demostrarlo tantas veces como haga falta.
Para
que el recrecimiento se culmine quedan muchas cosas por ver y
tenemos razones de sobra para no reblar. El domingo todos somos
importantes, a todos los que nos habéis apoyado en otras ocasiones
os necesitamos en Yesa. No te quedes en casa. |