Desde el tramo final del Ebro recibimos la noticia sobre el
caso Yesa con mucha tristeza y desesperanza porque es una
muestra más de que las cosas no han cambiado prácticamente
nada en el panorama hidráulico del estado español, ni en la
voluntad de los políticos, ni en la justicia.
La justicia ha actuado como siempre, dando la razón a los
que tienen el poder, sean del color que sean.
Este juicio sobre Yesa es algo más que un juicio entre los
afectados y los ejecutores de una macro obra. En este juicio
se juzgaba el funcionamiento de los órganos del estado, en
este caso, el funcionamiento del ministerio de
medioambiente. La sentencia es una sentencia política porque
nuestra democracia aun no es suficientemente madura para
exigir responsabilidad a los altos cargos del estado. Cargos
que por otro lado son cargos políticos designados a dedo y
cuyas decisiones son decisiones políticas que no obedecen a
las necesidades de la población, si no que obedecen a
intereses muy concretos económicos, de obtención de votos, y
de consolidación de poder.
Una sentencia favorable hubiera representado un avance
sustancial en el estado democrático, habría acabado con la
impunidad de los altos cargos del estado delante de
decisiones partidistas que afectan a nuestra sociedad y
habría acabado con el “todo vale”.
Pero detrás de este juicio hay personas que desde hace años
dedican muchos esfuerzos personales para defender su
territorio y modo de vida. La gente de Artieda y Río Aragón
son nuestros compañeros de lucha desde hace mucho tiempo,
juntos hemos compartido muchos momentos, buenos y malos, que
hemos sabido vivir con la mejor de nuestras sonrisa y de la
manera más positiva posible. Después de esta sentencia, hay
que levantarse una vez más y seguir batallando por defender
nuestro territorio, el futuro de nuestros hijos, de nuestros
nietos. Estoy convencida que aun quedan mucho años de lucha
y que quedan muchos momentos por vivir y compartir a los que
como siempre, sabremos sacarles la parte positiva.
Ánimo desde el tramo final de este gran río que nos ha unido
y que nos continuará uniendo.
LO RIU ES VIDA, PROU EMBASSAMENTS
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