12 de
octubre de 2001
LA
DETENCIÓN FUE ILEGAL
MÁS DE
DOSCIENTAS PERSONAS SE INCULPAN POR LOS HECHOS OCURRIDOS EN
YESA EN MAYO |
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Ecologistas en Acción y la asociación río Aragón contra el recrecimiento
de Yesa ha recurrido ante la Audiencia Provincial de Navarra, la
sentencia dictada por el juzgado de Aoiz, en el juicio a uno de sus
miembros, por los hechos ocurridos durante la colocación de la primera
piedra del recrecimiento del embalse de Yesa.
La sentencia, aunque condena a nuestro compañero a multa de 20 días de
arresto o al pago de mil pesetas por día, deja bien a las claras que la
detención fue ilegal. Este es uno de los hechos en los que se basa la
resolución presentada durante estos días.
Los cargos han ido bailando a lo largo de todo el proceso, lo que no da
una imagen de tener claras las cosas por parte de la Guardia Civil y por
el Ministerio Fiscal. Del momento de la detención, que fue por
resistencia a la autoridad, se pasó a un juicio por alteración del
orden, para finalmente la sentencia basarse en unas faltas por
desobediencia. Faltas que en todo caso ocurrieron posteriormente a la
detención, cuando nuestro compañero se negó a levantarse del suelo, una
vez que fue tirado al mismo y esposado por agentes de la Guardia Civil.
Como ya manifestamos en el anuncio del juicio, todos estos hechos son,
para Río Aragón y Ecologistas en Acción, una traba más que desde los
aparatos políticos y judiciales se está poniendo a los diferentes
colectivos que venimos, con la razón y nuestra acción pacífica y de
diálogo, denunciando el tremendo atentado medioambiental, cultural,
social y económico que dicha obra causaría.
A lo largo de esta semana se van a enviar a la Audiencia Provincial de
Navarra, las más de 200 autoinculpaciones, recogidas durante los últimos
días por la Asociación Río Aragón contra el recrecimiento de Yesa y por
Ecologistas en Acción. Estos escritos han sido firmados por todo tipo de
personas (afectados por el recrecimiento de Yesa, profesores
universitarios, ecologistas, ...). En ellos se indica que los firmantes
mantuvieron en todo momento el mismo comportamiento que Chesús Ferrer y
solicitando, por ese motivo, la misma condena para ellos. Igualmente
expresan su oposición al Recrecimiento del embalse de Yesa, aunque por
ese motivo deban ser apaleados, empujados, juzgados y condenados como
nuestro compañero.
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