Empieza la Marcha a Bruselas, se acabó la tregua. Leña al mamotreto del PHN. End of relax. La web de esta movida: www.marchabruselas.com. Allí están las etapas, las fechas de salida y toda la información. Hasta hay un número de cuenta para apoyar económicamente, que estas cosas tienen mucho gasto.

Llevamos una temporadita sin PHN. Pero el mamotreto avanza, el BOE sigue imprimiendo cosas, edictos, decretos, licitaciones, burrufalla hidráulica... Ahora se anuncia la Marcha a Bruselas, que debe ir con mayúsculas, como Teruel Existe. Si PHN va con mayúsculas, con siglas nefandas, la Marcha Azul también. Los medios han de estar en todo este estrapalucio. Con el portátil, las fotos digitales y las teles, ay, las teles. Esta excursión al corazón de EuroEuropa tiene un libro. Tendría que ir Miguel Mena, que tiene fuerza de ciclista --y no fuma-- y contar todo esto día a día. La Marcha Azul, si no se arropa y se le hace un poco de logística, se puede agostar en ese Tour sin sponsors. Hay marcas comerciales que deberían apoyar a estos esforzados y esforzadas del agua y futuro, igual que se esponsorizan los conciertos u otras manifestaciones. A veces, las marcas han de estar en los temas. Las marcas, para ser globales, han de estar por lo local y fijarse en las encuestas. De aquí sale una película, o varias. Al final, el PHN, que es una chapuza anacrónica, un disparate surreal, aún nos va a dar ideas para disparar el PIB.

La Marcha Azul es el futuro. Sale de aquí, sale de allá, hay gente que podrá estar un día, otra tirará millas hasta el final... pero el vecindario ha de estar siempre encima, ayudando y aplaudiendo a esta manifestación móvil. Esta marcheta que arranca con toda la humildad del verano, va a poner a Aznar en un brete diario.

Va a partir la marcha del verano rumbo a septiembre en Bruselas. Esto va a ser el auténtico Tour de Francia, de Europa. El Gobierno de Aragón debería calzarse las chirucas y participar en este nuevo camino del agua. Ahora, con el móvil, lo que mola es un gobierno itinerante. Hasta el alcalde de Zaragoza debería dejarse de tiquismiquis y apuntarse a la Marcha. De paso, al andar, podrían zanjar lo de la nueva Romareda.

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