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LA CITA
ESTA PREVISTA PARA LA PRÓXIMA SEMANA
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Jornadas paralelas de defensores y detractores de
embalses
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Zaragoza acoge a la vez sendos encuentros del Comité
de Grandes Presas y de Coagret
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Los temas de debate serán similares, pero los
enfoques serán totalmente opuestos
R. L. M. ZARAGOZA
Zaragoza acogerá la próxima
semana una doble cita hidráulica: defensores y
detractores de los grandes embalses debatirán en
sendos encuentros diferentes cuestiones de la
construcción y explotación de presas. Los temas, en
ambos, serán similares. Los enfoques, sin embargo,
serán totalmente opuestos.
El Comité Nacional Español
de Grandes Presas ha organizado para los próximos días
29, 30 y 31 las VII Jornadas Españolas de Presas.
Coagret (Coordinadora de Afectados por Grandes
Embalses y Trasvases) realizará sesiones de debate
sobre el mismo tema durante los días 28, 30 y 31.
No es una coincidencia.
El citado comité eligió Zaragoza como sede de las séptimas
jornadas en su sexta reunión, celebrada en Málaga en
1999. Con su decisión quiso sumarse a la celebración
del 75 aniversario de la Confederación Hidrográfica
del Ebro (CHE). Coagret, según explicó a este diario
José Javier Gracia, miembro de la coordinadora, ha
querido propiciar un "foro alternativo" con
el que dar el "contrapunto" a las jornadas
del comité nacional.
De esta forma, mientras
en el encuentro gestado hace tres años se hablará de
la gestión de la explotación y la seguridad de las
presas, en la cita organizada por los detractores de
los grandes embalses se abordarán los impactos de
estas infraestructuras sobre el territorio. Si en el
primero se analizarán los beneficios de las presas,
en el segundo se tratará la relación entre presas y
economía. Además, en este último se dará un repaso
a los procedimientos administrativos en la aprobación
de proyectos de embalse.
DIFERENCIAS
El objetivo
de las jornadas nacionales, según una nota de prensa
de la organización, es "dar una respuesta a la
sociedad y a aquellas personas que todavía mantienen
dudas sobre la seguridad de estas instalaciones hidráulicas".
En opinión de Coagret,
el encuentro del Comité de Grandes Presas --en el que
colaboran algunas de las constructoras más
importantes del país-- "glorifica el hormigón y
la gran obras pública" justo en un momento en el
que en Aragón "se abren iniciativas de diálogo
entre el llano y la montaña".
El
Periódico de Aragón, 29-V-2002
COAGRET
INICIA EN ZARAGOZA UNAS JORNADAS SOBRE PRESAS
- "Los
embalses no deben hacerse siempre a costa de los
mismos"
- Los
afectados por pantanos reclaman ser escuchados
R. L. M. ZARAGOZA
"Las regulaciones
de agua pueden ser imprescindibles para el desarrollo,
pero hay que plantear cómo hacerlas. No pueden
hacerse siempre a costa de los mismos". Fue una
de las consideraciones realizadas ayer por Rosa
Pallaruelo, presidenta de la Mancomunidad del
Sobrarbe, quien participó en las jornadas sobre
presas organizadas por la Coordinadora de Afectados
por Grandes Embalses y Trasvases (Coagret).
La citada organización
inició ayer un encuentro en el que se analizan los
embalses desde la llamada nueva cultura del agua.
Estas sesiones de trabajo --que continuarán mañana y
pasado-- pretenden ofrecer una visión alternativa a
la que se dará a partir de hoy y hasta el viernes en
las VII Jornadas Españolas de Presas.
La primera jornada de
Coagret se centró en el análisis de los impactos de
las grandes presas en el territorio y en la mesa
redonda celebrada ayer --a la que asistió un centenar
de personas-- intervinieron Rosa Pallaruelo, José
Luis Bartolomé, jefe de Urbanismo del Ayuntamiento de
Jaca, Belén Boloqui, profesora de la Universidad de
Zaragoza y presidenta de Apudepa (Asociación para la
Defensa del Patrimonio Aragonés) y Miguel Solana, de
la Asociación Río Aragón.
Pallaruelo explicó el
impacto de los embalses en el territorio "desde
el punto de vista de alguien que vive en ese
territorio". Habló de la desestructuración y
las consecuencias ambientales y económicas de estas
obras y de la "inconsistencia" de los
"aparentes beneficios" que conllevan.
RETO La ponente indicó
que el debate no está en la construcción o no de
embalses, sino en la necesidad de "pactar cómo
hay que hacerlos". Abogó por buscar el acuerdo e
instó a la Administración a propiciarlo. "No es
imposible llegar a acuerdos; no hay que tener miedo a
sentarse en una mesa", dijo. Y apostó también
por acometer planes de restitución y de compensación
por los embalses en todos los casos y sin
condicionantes. También denunció que no se hable con
los afectados por las obras de regulación.
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