ARAGÓN PRESS. Sociedad 4/5/2001-12:53 

LOS NIÑOS DE ARTIEDA PIDEN EN ZARAGOZA QUE NO SE RECREZCA YESA Y NO SE INUNDEN SUS TIERRAS 

Los únicos ocho niños que viven en la localidad zaragozana de Artieda han viajado hoy a la capital aragonesa para pedir, una vez más, que no se recrezca el pantano de Yesa. Estos pequeños han vivido desde que nacieron el miedo a ver inundadas sus tierras y sus padres los han llevado, desde que eran bebés, a todas las manifestaciones y protestas contra la ejecución de las obras del Pacto del Agua. Por eso hoy, durante la clase que han recibido en la acampada de la plaza de Aragón, impartida por la profesora María Antonia Antoranz, han argumentado sus razones contra el recrecimiento de Yesa y han explicado muy claramente que no quieren abandonar su pueblo, porque en él están sus amigos, sus casas y "muchos árboles naturales que no hay en Zaragoza". 


Zaragoza.-Lara tiene seis años y ha sido una de las primeras en llegar a clase esta mañana. Ha ido, como siempre, a su escuela, la Peña Nabla. La única diferencia es que hoy sus pizarras y pupitres estaban instalados en el corazón de Zaragoza, justo donde la Coordinadora contra los Grandes Embalses y Trasvases (Coagret) levantó sus tiendas de campaña el pasado 23 de abril. Esta pequeña comparte, desde que nació, la lucha de sus padres contra el recrecimiento de Yesa y a su corta edad no tiene miedo de los monstruos, sino de ver "el suelo de Artieda con agua y lleno de piedras, destrozado, y a todos nosotros nadando por las calles porque han hecho más grande el pantano".

Hoy ha acudido a la "clase protesta" con sus siete compañeros de escuela, que son también los únicos vecinos de su edad que quedan en el municipio zaragozano. Han explicado muy claro a todo el que quería oírles que "queremos ir a nuestra escuela y no a un cole de Zaragoza y vivir en mi casita y no en la ciudad". Eso, decía Víctor, "porque aquí hay muchos coches y demasiada gente".

Los conocimientos de Lara le permitían hasta enumerar algunos de los municipios afectados por el recrecimiento de Yesa: "estaba Sigüés, Ruesta y Salvatierra, ya no me sé más -decía-, pero seguro que habrá algunos, porque ¿acá también lo van a inundar?".

Algunas de estas dudas han sido disipadas durante la primera clase que han recibido de la profesora de secundaria María Antonia Antoranz que, aprovechando que hoy se conmemora en Jaca la primera victoria contra los musulmanes, ha narrado también a los pequeños los orígenes del Reino de Aragón. Para esta maestra, dar clase a los niños ha sido todo un orgullo, porque comparte su lucha "contra un ataque al territorio sin precedentes, y a un pueblo que empezaba ahora a resurgir" y porque éste es un buen ejemplo de la conciencia adoptada por unos niños que han convivido desde pequeños con la lucha de sus padres.

Así ha sido, explicaba María Jesús Mayayo, madre de Adrián, uno de los ocho pequeños de Artieda que hoy recibía clase en Zaragoza. "Estos chiquillos están ya acostumbrados a todo porque se han manifestado con nosotros y han asumido esta lucha". María Jesús, igual que las restantes 114 personas que están censadas en este municipio zaragozano está convencida de que no se recrecerá Yesa porque, asegura, "no les dejaremos hacerlo".

Este verano, el municipio y las localidades colindantes contarán con el apoyo de la acampada de Coagret, que ya ha previsto instalarse allí para evitar que se destruya el camino de Santiago a su paso por esta zona.

De momento los pequeños contaban a su nueva profesora su situación, interrumpían la clase con comentarios acerca de fósiles y restos romanos que podrían quedar bajo las aguas del embalse y hablaban entre ellos. Hoy les espera una jornada casi festiva y su mayor ilusión es poder visitar la Aljafería después del "cole".