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Heraldo de Aragón, jueves, 26 de octubre de 2000

Masiva respuesta al paro del Pirineo

Miles de personas secundaron ayer el paro y las concentraciones celebradas en distintas comarcas del Pirineo para pedir una moratoria a varios grandes embalses incluidos en el Pacto del Agua y mostrar su oposición a los trasvases


HERALDO Huesca
Las comarcas del Pirineo oscense expresaron ayer con un paro de dos horas su oposición los embalses más controvertidos del Pacto del Agua y a los trasvases, que prevé el anteproyecto del Plan Hidrológico Nacional. Los ciudadanos que acudieron a las distintas concentraciones y que cerraron sus comercios pidieron diálogo entre las administraciones y los pueblos de la montaña y reclamaron también respeto por una tierra poco poblada y olvidada en demasiadas ocasiones.

La movilización respondía al llamamiento realizado por las cuatro asociaciones que luchan para evitar la construcción de nuevos pantanos en territorio pirenaico: la Asociación Río Aragón (contra el recrecimiento de Yesa), la Asociación Río Ara (Jánovas), la Coordinadora Biscarrués-Mallos de Riglos y Asociación Cultural para la Defensa del Ésera (contraria a Santaliestra). Estas organizaciones contaron con el respaldo de la Confederación General del Trabajo, sindicato que ofreció sus siglas para dar cobertura legal a la huelga.

Un cierre de comercios, entre las 12,00 y las 14,00 horas, precedió la celebración de concentraciones en Jaca, Sabiñánigo, Graus, Aínsa, Ayerbe y otras cabeceras de comarca bajo el lema «Por la dignidad de la montaña y el diálogo». Las concentraciones congregaron en total a más de diez mil manifestantes, según las entidades convocantes.

Para los organizadores, el seguimiento del paro fue mayoritario en la Jacetania, en cuya capital se manifestaron 5.000 ciudadanos. Fue el acto más masivo. En Sabiñánigo, se concentraron más de 1.500 personas, una cifra similar a la registrada en Aínsa, hasta donde se desplazaron vecinos de toda la comarca en autobuses. Otro millar de personas se manifestó en Graus y varios centenares lo hicieron en Ayerbe, Benasque, Benabarre y Castejón de Sos. Los convocantes destacaron que el paro fue seguido de forma mayoritaria en el comercio, y también por profesores, alumnos e instituciones locales.

Moratoria para grandes obras hidráulicas

En las concentraciones se leyeron manifiestos para reivindicar una moratoria de cinco años en la ejecución de los grandes embalses pendientes de ejecución, los de Santaliestra, Biscarrués, Jánovas y el recrecimiento de Yesa. Reivindicaron, asimismo, la apertura de cauces de diálogo entre las distintas partes implicadas en la ejecución de las obras hidráulicas con el fin de favorecer soluciones de consenso entre las zonas cedentes de agua y las comarcas beneficiarias.

El paro tenía como objetivo también «detener los trasvases desde su origen en la montaña» y «salvar nuestros ríos y evitar nuevos pueblos y valles inundados». Las asociaciones convocantes del paro general consideraron un «hito histórico» la jornada de ayer, «un punto de inflexión hacia una nueva política del agua en Aragón». «La masiva respuesta de los montañeses –afirmaron– no puede ser ignorada por los gobiernos de Zaragoza y Madrid».

Estas organizaciones destacaron el valor de la respuesta obtenida, «inédita en un entorno como el de las comarcas del Pirineo», y agradecieron el «respaldo social» recibido. En un comunicado, se dirigieron al Gobierno aragonés, «que hasta la fecha ha permanecido sordo ante nuestras reivindicaciones» –dijeron–, para emplazarle a recibir a sus representantes de forma urgente para trasladarle el mensaje de los manifestantes.

La protesta fue apoyada por unos doscientos colectivos cívicos, asociaciones y ayuntamientos, pero no lo hizo ningún partido político, salvo Chunta Aragonesista.

Asociación Río Aragón-COAGRET